miércoles, 13 de marzo de 2013

Absórbanme de la eternidad en el artificio


WILLIAM BUTLER YEATS
(Irlanda, 1865-1939)

Navegando hacia Bizancio

I
Éste no es un país para los viejos. Jóvenes
unos en brazos de otros, posados pájaros,
—esas generaciones por morir— en su canto:
y las cascadas del salmón, los poblados
mares de la caballa, pescados, carne o ave,
loan todo el verano el engendramiento,
lo que nace o que muere. Prisioneros
de esta música sensual y negligente,
los monumentos sin edad del intelecto.

II
Un viejo es un menospreciado, camisa
colgada de un palo, salvo que el alma
cante, marcando con las manos
el compás, más alto a medida
que sea más andrajoso su vestido mortal.
Y como no hay escuela de canto
que no estudie las glorias de su propia
magnificencia, navego el mar y vengo
hasta la ciudad santa de Bizancio.

III
Sabios de pie frente al fuego de Dios
como en los dorados mosaicos,
vengan desde el sagrado fuego, aleteen
en la espiral, y sean los maestros
cantores de mi alma. Consuman
todo mi corazón. Enfermo de deseos,
atado al animal que ha de morir,
no sabe lo que es; absórbanme
de la eternidad en el artificio.

IV
Ya fuera de lo físico, no tomaré
forma de cuerpo en nada de lo que hay,
salvo en la que el herrero griego
hace golpeando y esmaltando el oro,
para tener despierto al Emperador.
Salvo también que me ponga a cantar
en una rama de oro a los señores
y damas de Bizancio, del pasado,
de lo que pasa y de lo que vendrá.

(Traducciones de Eduardo D’Anna. De Poemas completos. Alción Editora. Córdoba, 2011)
***
Una capa

De mi canción hice una capa
Cubierta de mitos viejos
Desde los pies hasta el cuello.
Pero los tontos la cogieron,
Llevándola ante la gente
Como si la hubieran hecho.
Canción, deja que la lleven,
Porque más resolución hay
En andar desnudo.

Responsabilidades, 1914. Traducción de Luis Cernuda.

A Coat

I made my song a coat
Covered with embroideries
Out of old mythologies
From heel to throat;
But the fools caught it,
Wore it in the world's eyes
As though they'd wrought it.
Song, let them take it,
For there's more enterprise
In walking naked. 
***
Los cisnes salvajes de Coole

Los árboles están en plena belleza otoñal,
y los senderos del bosque están secos,
en el crepúsculo de octubre el agua
refleja un cielo quieto;
sobre el agua que desborda las piedras
hay cincuenta y nueve cisnes.

Diecinueve otoños me cayeron encima
desde la primera vez que los contara;
y vi, mucho antes de haber terminado
que todos de repente vuelo alzaban
dispersándose en grandes anillos rotos
en revuelo de alas clamorosas.

Yo apreciaba esas criaturas brillantes
y hoy mi corazón está dolido.
Todo cambió desde que, al oír en el ocaso,
por primera vez en esta costa
sobre mi cabeza el tañer de sus alas
con paso más ligero caminara.

Frescos aún, amante con amante,
chapotean en las frías
y afables corrientes o por el aire ascienden.
Sus corazones no han envejecido;
vagan a su antojo, pues pasión o conquista
aún los esperan.

Flotan ahora sobre el agua tranquila,
misteriosos y bellos.
¿Entre qué juncos se asentarán,
al borde de cuál lago o estanque
deleitarán los ojos de los hombres
cuando despierte yo algún día
para descubrir que se han volado?

Antología poética, traducción y prólogo de Delia Pasini, Editorial Losada, Buenos Aires, 2011

The Wild Swans at Coole

The trees are in their autumn beauty, 
The woodland paths are dry, 
Under the October twilight the water 
Mirrors a still sky; 
Upon the brimming water among the stones 
Are nine and fifty swans. 

The nineteenth Autumn has come upon me 
Since I first made my count; 
I saw, before I had well finished, 
All suddenly mount 
And scatter wheeling in great broken rings 
Upon their clamorous wings. 

I have looked upon those brilliant creatures, 
And now my heart is sore. 
All’s changed since I, hearing at twilight, 
The first time on this shore, 
The bell-beat of their wings above my head, 
Trod with a lighter tread. 

Unwearied still, lover by lover, 
They paddle in the cold, 
Companionable streams or climb the air; 
Their hearts have not grown old; 
Passion or conquest, wander where they will, 
Attend upon them still. 

But now they drift on the still water 
Mysterious, beautiful; 
Among what rushes will they build, 
By what lake’s edge or pool 
Delight men’s eyes, when I awake some day 
To find they have flown away?
**
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Somos parecidos a esos sapos que en la austera noche de los pantanos se llaman sin verse, doblegando con su grito de amor toda la fatalidad del universo.
René Char


No haría falta amar a los hombres para darles una ayuda real. Sólo desear hacer mejor cierta expresión de su mirada cuando se detiene en algo más empobrecido que ellos, prolongar en un segundo cierto minuto agradable de su vida. A partir de esta diligencia y cada raíz tratada, su respiración se haría más serena. Sobre todo, no suprimirles por entero esos senderos penosos, a cuyo esfuerzo sucede la evidencia de la verdad a través de los llantos y los frutos.
René Char